Allá por el año 1990, se nos propuso el reto de tratar a los que ahora llamamos animales exóticos y entonces.... "esos de los que nadie sabía nada... y se prefería preguntar al pajarero de la esquina": canarios, periquitos, hamsters...hoy además de ellos, tenemos, cobayas, conejos de mil razas, reptiles: algo más que esas tortugas que regalaban a los niños como si fueran juguetes, y que ahora son una plaga en nuestros ríos... incluso peces ornamentales tanto en acuario como en estanque.
Nos propusimos trabajar para que tuvieran un trato justo, respetuoso y que fueran considerados como algo más que un juguete, y luchar contra la idea pre-establecida de que dado su pequeño coste económico, era preferible no tratar y comprar otro, a intentar sanarlo.
Desde entonces nuestra principal lucha además de ir en contra de la enfermedad, ha sido EDUCAR a los propietarios en las neesidades de habitat de estos animales, muchas veces extraños en nuestra cultura.